de repente pensé
¡no!
¡no quiero!
¡deshazlo!
¡tengo miedo!
¡no quiero ir!
¡olvidalo!
¡prefiero quedarme aqui!
¡dejalo!
¡no insistas!
y muy a mi pesar... lo hecho hecho está.
Llueven lágrimas sobre el café.
Ahora escribo en un cuaderno muy pequeñito todas las cosas que quiero ordenar en mis pensamientos. Lo llevo siempre encima, aunque much...