O se acaba o te acabas.
No puedes seguir así. Es un puto veintisiete.
Bastante eres tu como para echarte un treinta.
Dijiste que ya no soñabas que ahora te dedicabas a ponerte metas.
¿Cómo?¿Con cuarenta y seis y cuarenta y ochos?
Apágate.
¡Fh!
Si, los números son MUY reales. Tenias razón.