Me estoy empezando a hartar de mi. Pero no se engañarme a mi misma.
Tengo sueños/pesadillas donde me estampan en la cara todas mis necesidades más profundas. Y no me gusta porque cuando estoy despierta no puedo dejar de decirme:
"Es mentira, era un sueño, estás bien, todo está bien, así está bien...
No lo arruines."
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Quizás en mi lecho de muerte,
en un acto de desesperación
admita lo que es evidente,
para el resto de seres humanos.